Desafio a Cambiar Romanos 12:1-2

Por tanto, hermanos míos, les ruego por la misericordia de Dios que se presenten ustedes mismos como ofrenda viva, santa y agradable a Dios. Este es el verdadero culto que deben ofrecer. ²No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto[1] (Romanos 12:1-2)

Existe una tensión en nuestra cultura. De una manera vemos la necesidad de cambios y tenemos deseos de cambiar. Esto es verdad en varias cosas, especialmente en nosotros. Somos bombardeados con mensajes que si fuéramos mas delgados, esbeltos, mejor vestidos, más en “estilo”, mejor parecido, mejor financiado, o mejor perfumado, seriamos mas felices, mas satisfecho. Los medios de propaganda lo ponen así y lo compramos. Compramos porque tenemos un anhelo interno de cambiar y tener algo mejor.

De otra manera, existe un obstáculo al cambio verdadero. No nos gustan lo que no conocemos y lo que pueda traer. Una vez, el duque de Cambridge se reportó y dijo, "Cualquier cambio en cualquier momento tiene que ser deplorable." Esto suena como el viejo dicho, "venga dinero, venga dolores, mi condición sigue."

La siguiente es una carta para el presidente de los Estados Unidos, fechada el 31 de enero de 1829.

Presidente Jackson,

El sistema de canal de este país esta siendo amenazado por la diseminación de una nueva forma de transportación conocida como ferrocarriles. El gobierno federal debe preservar los canales por las siguientes razones.

Uno, si los botes son suplantados por los ferrocarriles, resultará en un desempleo muy serio. Capitanes, cocineros, manejadores, reparadores y aquellos que trabajan en los muelles serán dejados sin un medio de vivir, sin mencionar los numerosos granjeros ahora empleados en granjas de henos para caballos.

Dos, constructores de botes puede sufrir y aquellos que reparan y construyen en la industria de la construcción marítima serán destituidos.

Tres, los botes de canales son absolutamente esenciales a la defensa de los Estados Unidos. En el evento de que lleguen problemas con Inglaterra, el Canal Erie puede ser el único medio por el cual pudiéramos mover los efectos que son importantes para llevar una guerra moderna.

Como pueden conocer bien, Señor Presidente, los coches de los ferrocarriles son impulsados a la enorme velocidad de 15 millas por hora por maquinas que además de hacer peligrar la vida, rugen por los campos, incendiando las cosechas, asustando al ganado y aterrorizando mujeres y niños. El Señor nunca intento que la gente viajara a tal velocidad que rompe cuellos.

Sinceramente suyo,

Martin Van Buren Gobernador de New York

¿Por qué nos resistimos a los cambios tan ardientemente? Quizá tememos que ese cambio pueda hacernos más infeliz de lo que estamos. La verdad es que algunos cambios no-solo son inevitables, sino que son necesarios. La Biblia habla de esta necesidad en nosotros. Y nos da la receta para que hagamos el trabajo.

No es una crema milagrosa para esconder todo lo malo. En verdad, la medicina puede sorprenderte — no porque tenga mal sabor; es peor que eso. Para poder hacer mejor, esta medicina tiene que matarte.

El Desafío

Por tanto, hermanos míos, les ruego por las misericordias de Dios … (v. 1)

Somos desafiados por las misericordias de Dios. Sin Cristo estamos condenados ante Dios. Somos pecadores por naturaleza y decisión. Pero a pesar de nuestra pecaminosidad Dios nos ama. Mandó a Jesús a morir por nosotros y liberarnos del pecado y de las terribles consecuencias del pecado, muerte eterna.

Por Su gran misericordia El nos salvó. Por eso debemos responder. No podemos quedar como espectadores mirando lo que sucede. Alguien una vez describió un juego de “fútbol” como un juego donde veintidós hombres en el campo de juego necesitaban descansar mientras eran observados por setenta y dos mil personas en las gradas que necesitaban ejercicio. Mientras el deporte del fútbol puede ser un deporte de espectadores para muchos, el cristianismo no lo es. Tenemos que envolvernos en la acción. Nunca debemos tomar la misericordia de Dios como algo que nos merecemos. Tenemos que motivarnos a tirarnos al campo de juego.

Observa te ruego aquí. Pablo dice, te ruego… A menudo, como cristianos nos tienen que rogar. Nos convertimos en apáticos en nuestro compromiso. Quizá nuestra mente ha estado ocupada con las cosas de este mundo y necesitamos que nos recuerden nuestras verdaderas prioridades en la vida. Aquí el Espíritu Santo ruega que oigamos lo que Él tiene que decirnos.

Por tanto, hermanos míos, les ruego por la misericordia de Dios que se presenten ustedes mismos como ofrenda viva, santa y agradable a Dios. Este es el verdadero culto que deben ofrecer.[2](Versículo 1)

Se nos ruega a presentarnos ante Dios. Es una presentación de nuestros cuerpos. Estamos unidos en el cuerpo. Es la mayor fuente de tentación. Es la representación visible de lo que las Escrituras llama "la carne" — esos deseos que tenemos son los que hacen la Guerra contra el Espíritu. Por eso es que tenemos que ofrecerlos a Dios como un sacrificio. Haciendo esto, entregamos nuestro cuerpo a Él y permitimos que Él nos controle.

Tu puedes decir, “¿Por qué Dios quiere eso? Mi cuerpo no es tan bueno, tiene un corazón malo. ¿Algunas veces le llegan pensamientos … y dices que Dios quiere mi cuerpo?” Pero Dios lo quiere. Ha dicho que se agrada con eso. Ha dicho que es un sacrificio santo. Dios recibe tu cuerpo si tu se lo ofreces.

Pero El quiere un sacrificio vivo. Recuerda, requiere sacrificios vivos. Podrás pensar que es contradictorio. ¿Cómo puede ser un sacrificio vivo cuando ha sido sacrificado? Debe de haber algún error. ¿Cómo podemos morir y vivir a la misma vez?

Debemos entender que la muerte que experimentamos cuando nos encontramos con Cristo es de verdad. Es la muerte al yo. Es el costo del compromiso. Dietrich Bonhoeffer dijo, "Cuando Cristo llama a un individuo, El le ofrece llegar y morir." Si no estas dispuesto a dar Dios todo, si no estas dispuesto a seguirlo. Y cuando le damos todo. Hacemos un sacrificio, y morimos. Pero a través de esta muerte al yo resucitamos en vida.

Hay dos sacrificios vivos en la Biblia, Isaac y Jesús. Ambos fueron ofrecidos a Dios. Cuando Isaac se le permitió vivir, se dijo de el que había vuelto a vivir. En la mente de Abraham ya había sido ofrecido tres días antes cuando Dios le habló. Jesús murió en la cruz por nuestros pecados y se levanto otra vez en resurrección de vida. Tu no puedes experimentar la resurrección de vida hasta que tu no mueras.

Tenemos que morir. Es de alta prioridad para nosotros. No podemos cultivar la vida cristiana antes de consagrar nuestro cuerpo. A esto se le llama nuestro acto espiritual de adoración. Es la verdadera adoración. Es el mayor acto de adoración que podamos hacer.

Nosotros como creyentes, podemos vivir en uno de tres niveles, el sensual, el del alma, o el espiritual. Por sensual quiero decir que somos gobernados por los sentidos. Los deseos nos manipulan. Tu puedes ser cristiano y ser sensual . Tu no asiste a los cultos porque llueva o no llueva. No vienes los sábados a la iglesia porque esté demasiado cansado. Tu no trabajas con ciertas personas porque te sientas incomodo con ellas. Esto es cristianismo en su nivel mas bajo.

Está el nivel del alma. Aquí hablo del intelecto, o emociones, o la voluntad. Es posible para un cristiano vivir enteramente en esta área y puede parecer ser espiritual, cuando en verdad sólo tiene apariencias. Puedes tener un enfoque al estudio de la Biblia en conocer. El conocer la verdad no hace que la vivas. Puedes vivir en el reino emocional. Te puedes sentir profundamente emocionado.

Pensamientos del Calvario te pueden hacer llorar. Eres movido a llorar por algún himno cristiano sentimental del Salvador. Te puede mover por los sufrimientos en la India, Ruanda, Haití, Yugoslavia, o algún otro lugar que estén sufriendo, para vaciar tus bolsillos cuando se hace un pedido. Puede haber muchos aleluya en un servicio de adoración. Pero nada de eso puede ser motivado por el Espíritu. Puedes tener una voluntad de acero, por lo que puedes controlar tus hábitos. Cuando te hicisteis cristiano pudiste quitar todo aquello que había que quitar y comenzaste donde había que comenzar. Para las apariencias externas eras espiritual. Pero de verdad, tu era el que estaba controlando.

Para vivir en el plano espiritual, debes ser controlado por el Espíritu. Y algunas veces la única manera de saberlo es permitir que la luz de la Palabra de Dios nos examine porque "penetra dividiendo alma y espiritu" y "juzga los pensamientos y actitudes del corazón." Nuestro desafío es unirnos a Dios y permitir que El viva en y a través de nosotros, para controlar todas las cosas.

El Cambio

No sólo somos desafiados por las misericordias de Dios somos también cambiados por metamorfosis. Debe haber una transformación para llegar a ser lo que necesitamos ser. Cuando ofrecemos nuestros cuerpos como sacrificio vivo lo hacemos una sola vez en nuestra vida. Esta es la connotación de la palabra ofrecer en griego. Debemos adoptar un plan de acción que permita la vida de resurrección de Cristo para que nos cambie a la imagen de Cristo.

Pero tenemos un problema. Existe un problema al someternos a las presiones que abundan alrededor de nosotros. Este es el peligro, el problema.

No vivan ya según los criterios del tiempo presente...[3] (v. 2)

El problema que enfrentamos en el mundo busca conformarnos a su imagen. Existe una presión para estar a la moda del mundo. La palabra vivir o conformarse en el griego es suschematizo, que se refiere a una apariencia externa o parecerse, siendo moldeados por la moda de alguien. No estoy hablando de la ropa para vestir, o como tu te peinas. Siendo moldeado por el mundo es mas que eso. El mundo es la humanidad sin Dios.

Somos nosotros en nuestro propio camino. Haciendo nuestras cosas, a nuestra forma. El mundo pone al yo en el centro. Esta es la actitud que permea en el mundo. Y puedes encontrar a muchos cristianos en esa actitud. Muchos cristianos en la iglesia actuando como en el mundo. Escogen a una iglesia solo por que satisface sus necesidades, como si la iglesia fuera el centro de ellos. Esta es la filosofía del mundo.

Somos llamados a rechazar esta filosofía y estilo de vida. La advertencia ha sido dada y si no la oímos, vamos a perecer. Debemos pelear para no ser moldeados por el mundo.

… al contrario, cambien su manera de pensar … (v. 2b)

Estamos en un proceso por el cual seremos igual a Cristo. Es el proceso de la transformación. La palabra griega que se usa aquí es metamorphousthai, de la que se origina la palabra metamorfosis. Es una palabra interesante en la que contiene la palabra griega morphe, que significa esencia. Lo que tenemos aquí es un cambio de naturaleza, no es meramente un cambio externo. Igual que la transformación del gusano a mariposa es tan radical que no puedes decir que serán lo mismo luego del cambio, así es que con nosotros los cristianos.

Parte del proceso es la renovación de nuestra mente. Mientras nuestra mente se transforma, nuestro yo interno se cambia. Es en la persona interna que llegamos a ser como Cristo. Nuestra mente tiene que ser re – adiestrada para pensar en la forma correcta. Se nos dice en Filipenses capitulo cuatro piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama.

Solo podemos hacerlo meditando en la Palabra de Dios. Debemos buscar la oportunidad de leer y escuchar a Dios hablando. Mientras leemos para nosotros, nos enseña, mientras oímos nos ponemos a Su servicio, somos desafiados con Su verdad en la forma como vivimos y como pensamos. Y debemos ser desafiados para que nuestra mente sea renovada. Debemos responder a ese desafío entregando nuestra voluntad a ser obediente a la Palabra de Dios.

Esto nos trae la prueba de lo que esta ocurriendo en nosotros. Mientras estamos siendo renovados por nuestra mente, llegamos al lugar cuando, además de conocer la voluntad de Dios, viviremos para El.

Lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es. (v. 2c)

Solo una vida renovada se puede deleitar en conocer y hacer la voluntad de Dios. Solo una mente transformada puede probar la voluntad de Dios, para probar que es buena, grata, lo que es.

La voluntad de Dios es buena. Dios solo nos pide que hagamos lo que es bueno para nosotros. El no nos hiere por Su voluntad. Él quiere lo mejor. Nos ama y Jesús murió por nosotros. ¿Podrá Dios querer algo bueno para nosotros?

La voluntad de Dios es agradar. Si agradamos a Dios, Él nos va agradar a nosotros. Esto resulta en una relación correcta con Dios y nos asegura Sus bendiciones.

La voluntad de Dios es perfecta. No solo Dios quiere el bien para nosotros, El quiere lo mejor. No quiere que estemos en segundo lugar en Su reino, SU voluntad es que caminemos en nuestro diario vivir con Él. Podemos someternos alegremente, conociendo que estamos en Sus manos.

Somos desafiados por las misericordias de Dios a dar nuestros cuerpos como sacrificio vivo. Somos cambiados por metamorfosis en hombres y mujeres nuevos mientras meditamos en nuestras mentes en la Palabra de Dios.

Te pregunto, "¿Eres de El?" No te estoy preguntando si has hecho una decisión por Cristo. ¿Le has dado todo a El?

Un amigo me estaba contando de la clase de iglesita que tenemos en estos días. Es una “Iglesia-Lite” o “Cristianismo-Lite”. Donde solo damos el 5% de nuestro tiempo, el servicio de un sermón de 30 minutos para “cristianos. Es el lugar donde el himno de entrega es “Yo rindo algo de mí”. En vez de pararte en las promesas, nos paramos fuera de las promesa. Esto que vivimos no es lo que Dios quiere para nosotros.

El quiere todo. ¡Todo! Quiere todo tu tiempo, Lo quiere todo. ¡Todas las cosas! Quiere todo tu tiempo. Quiere todo tu dinero. Quiere todas tus horas de trabajo. Quiere todas tus horas de ocio. Quiere a tu familia, tu esposa, tus hijos, tu carro, tu casa. ¡Quiere entero! ¿Lo estás?

Se te está rogando a que seas transformado. No te conformes — déjate transformar. Permite que Cristo te transforme ahora.